martes, 30 de septiembre de 2014

#40

Buenas lectores. Como siempre, para no perder la costumbre. Escribo a altas horas de la noche, mientras se me cierran los ojos de sueño. Pero chicos, no lo puedo evitar. Es cuando me viene la inspiración para escribir.

Os voy a mostrar una imagen, un tanto curiosa. Muchos de vosotros os sorprenderéis al verla, ya que los que me conocen saben que sería incapaz de algo así. Pero lo voy a hacer, porque me apetece.
Aquí os la dejo.


Esta imagen resume perfectamente mi anterior fin de semana y esta semana, bueno, no del todo. Pero si la mayor parte de ella. No sé que os transmitirá esta foto, de hecho ME GUSTARÍA QUE ME LO DIJERÁIS ya que os molestáis en cotillear mi blog, al menos ayudadme a progresar como artista. En fin, disculpad si he sonado borde, pero necesitaba decirlo. Para mi esta chica, tiene mucho miedo. Muchos diréis ¿A qué debe temer esta pobre bichilla?, pues a su entorno. Tiene miedo y desconfía hasta de su sombra, por temor a ser traicionada por ella misma. Se esconde porque se siente más segura encerrada en si misma, dónde nadie pueda acceder y dañarla. Ya que dentro de ella hay un tesoro, que nadie ha sido capaz de encontrar. Puede que ni ella misma se hubiera percatado de ello. Es cobarde, y con razón. Ha sido apuñalada por la espalda y degradada a unos niveles que nadie se puede imaginar. Siempre se ha sentido como un complemento, no como una persona. Siempre ha temido a enfrentarse a sus propios miedos, antes alentaba a los demás a superarlos, mientras en su interior los demonios la comían viva y se apoderaban de su cuerpo. Esta, no es la realidad de una chica de por ahí. Es mi realidad. Esa chica encogida soy yo. Y sí, salgo desnuda, ya que a pesar de esconderme y huir con las orejas gachas, siempre me he mostrado tal y como soy.

Esta semana, tan dura, me ha hecho reflexionar mucho. Ni os lo podéis imaginar. No le deseo esto ni a mi peor enemigo. Pero ¿sabéis qué? me ha venido de lujo. Me he dado cuenta, de que esconderse no sirve para nada. Ya que si te atacan, lo harán de todas formas. Y hay que luchar, porque nadie dijo que la vida fuera fácil y de color de rosa, la vida es negra y oscura. Y tú, con un trapo debes limpiarla, para que sea más agradable para ti. Ya que la que vive eres tú, los demás ya se apañaran con lo suyo. He aprendido que soy más que un cacho carne y un número más en la lista del paro. Soy Carmen, una aspirante a artista. Que es capaz de conseguir lo que quiere, y más.

Y sabéis que más. Esto me hace feliz como persona.

Un saludo muy grande desde mi habitación, y buenas noches,

viernes, 26 de septiembre de 2014

#39

Buenas tardes ¿Qué tal os va mis queridos curiosos/lectores? Espero que os vaya mejor que a mi, sinceramente. Esto que estoy pasando es tan duro, que en ocasiones me deja sin aliento, hace que pierda el sentido de mi vida y mis ganas de luchar por seguir un día más. Pero, no puedo desafiar a la naturaleza y he de seguir adelante.
De cada golpe, se comenta, que te levantas más fuerte y que las heridas, el tiempo las cura. Pero esa es la teoría, que suele funcionar... sí, no te lo niego. Pero hay heridas que, ni el tiempo ni nadie, podrá tratar de reparar. Ni siquiera los médicos podrían con ello. Esas cicatrices permanecen en tu interior grabadas a fuego y nunca se irán. El tiempo lo único que hace en esos casos, es calmar la quemadura para que deje de doler.

La vida es muy puta, y este verano he podido vivirlo, tanto en mi piel como en mi alma. He caído redonda en un bucle del que jamás me hubiera imaginado. Nunca pensé en esa posibilidad. Mi corazón se estremeció al ver a esa persona, que ha estado a mi lado desde que nací, me enseñó lo que importa y lo que sobra, me alimentó y me dio una bofetada cuando me lo merecí. También me vio crecer y me soportó, durante 21 años. Tubo que aguantarme cuando íbamos a misa y yo, a los tres años, me ponía a gritar y dar patadas porque no quería estar ahí. Él me sacaba para que dejara de estorbar y correteara detrás de las palomas, con el fin de cogerlas y llevárselas a mi madre para darle un susto. Que lindos recuerdos.

Tú me contagiaste las ganas de dibujar, siempre con tu frase "Jo se dibuixar un tobogan redó perfecte" y el me lo dibujaba, y me encantaba. Le intenté imitar y así, conseguí la ilusión de mi vida. Si me paro a pensar, me has dado tantas cosas, sin apenas palabras. Me has enseñado que el dinero no importa para ser feliz, solo importa vivir con salud y una sonrisa en la cara, mientras haces lo que te apasiona. Echaré tanto de menos tus bromas sin sentido de las que tu solo te reías, mientras yo te miraba con cara de indiferencia y nuestros debates de política o cualquier cosa. Que casualmente siempre estabas en mi contra. Madre mía, si pudiera contar todo lo que me has aportado, podría estar meses escribiendo sin parar.

Ahora mismo, aunque no estés físicamente a mi lado, sé que te encuentras en alguna parte del mundo cuidando de mi y de mi madre, para que seamos felices y sigamos adelante. Aunque nunca te lo dije, en este momento más que nunca, puedo decir, que te amo como no amaré jamás a nadie. Y que mientras sigas en mi recuerdo, para mi seguirás a mi lado.

Ya que una persona muere cuando se la olvida.

Muchas gracias por darme la vida y hacer que sea quien soy.

jueves, 25 de septiembre de 2014

#38

Buenas noches queridos lectores. Hace mil que no publico nada por aquí, por mil razones. La que más me pesa, por desgracia es la pereza. Hoy quiero reflexionar sobre un tema que esta muy presente en mi vida. Empezaré por el menos importante, ya que el otro aún me conmociona demasiado y me hace daño recordarlo.

Hoy hablaremos de las relaciones amorosas. Que complicadas que son ¿verdad?. Ni los problemas de los dichosos cuadernillos rubio (los de mi época saben de que hablo) o las ecuaciones de segundo grado eran tan difíciles como lo pueden llegar a ser las relaciones entre dos personas que se aman. 
Cada persona es un mundo, es una historia y se comporta de una forma, hacer encajar todo eso es muy complejo. Se necesita mucha paciencia, ni os imagináis cuanta. Además de que se sufre mucho, no es como en los cuentos que nos venden en la tele, que todo es perfecto y arco iris, tu eres mi príncipe... tú, mi princesa, nos casamos y seremos felices y comeremos perdices. 
Y una polla como una olla, hablando mal y pronto. Al principio puede que sí, que todo sea fantástico. Que te sientas sumergida en una burbuja de fantasías de la que crees que nunca saldrás. O mejor dicho, no quieres salir jamás. Y así es los primeros meses, luego cuando os vais conociendo mejor, ves sus hábitos y hay cosas, que claramente, te molestan de él. Ya todo no es tan perfecto como lo pintan. Te rayas, pero a pesar de todo, tú le amas. Con todos sus errores y perfecciones. Pero llega un punto en el que todo se torna gris, surgen dudas respecto a lo que sientes, te sientes incomodo a su lado porque lo único que hacéis es discutir, no tenéis más temas de conversación ya que no compartis gustos... Y un millón de cosas que puedan surgir. Y en esos momentos piensas... ¿Qué ha ocurrido con nosotros? ¿Por qué al principio era todo tan bonito y de repente a caído en picado? ¿Podremos volver a aquellos tiempos felices?.

Mirad chicos que me leáis. El amor es cosa de dos. Si se quiere mantener esa relación, se lucha. Pero no solo una, sino ambos. Por qué si se lucha, los problemas se solucionan y desaparecen. Y así se crea una relación estable y consistente que puede aguantar hasta el más fuerte de los terremotos.
Pero todo esto, es cuestión de voluntad, si no se pone empeño en seguir adelante y arreglar los problemas, y sobretodo, perdonar los errores. No se avanza y se va todo al garete. 


Espero que si alguien tiene problemas con sus respectivas parejas y mi post le haya ayudado a solucionarlos. Me alegraré muchísimo por vosotros.

Y bueno, esta es mi reflexión sobre el tema. Espero que sirva de ayuda.